43. VIDA PRIVADA

Se dice que la empresa debe respetar la vida privada de sus empleados, que lo que hagan o no hagan fuera del horario laboral es algo que no incumbe ni afecta al trabajo. Además, se dice con mucha fuerza e indudable convicción, que debería estar prohibido por la Ley cualquier actuación de la organización que esté originada en el conocimiento de la vida privada de las personas.

Cuando me piden opinión solo pregunto qué piensan que se debería hacer en el caso de producirse alguna de las siguientes circunstancias:

• El tesorero se gasta cada semana cantidades superiores a su salario mensual jugando en el casino y él, sin cortapisa alguna, puede acceder al equivalente de tres veces su retribución anual de la caja de la empresa.
• En época de negociación del convenio colectivo, el secretario del responsable de la negociación por parte de la empresa ha comenzado a dormir apasionadamente en el mismo colchón que la presidenta del comité de empresa.
• Un comprador no excesivamente listo frecuenta mucho a la vendedora estrella de un proveedor no excesivamente fiable.
• La responsable de la guardería de la empresa ha sido denunciada tres veces por maltrato a sus hijos pequeños.
• El jefe de mantenimiento eléctrico comienza a beber cuando sale de trabajar a las seis de la tarde, a las siete está como una esponja y los fines de semana no sale del baño de güisqui.
• La directora comercial, siempre en su tiempo libre, consume quilos de cocaína.

Hay quien después de pensarlo sigue diciendo que no hay que hacer nada.

42. TIJERAS EN LOS RIÑONES

A las once de la mañana, en la sala absolutamente atestada de la magistratura de trabajo hacía mucho calor. Se veían en la causa cuarenta y dos despidos por participación en huelga abusiva e ilegal. Yo había firmado las cartas y representaba a la empresa en el juicio.

Después de confesar me senté en una silla libre en la segunda fila, dispuesto a pasar las horas respirando el terrible ambiente del acto final de una larga huelga que, por la locura de todos y mi insuficiente habilidad, no había logrado cerrar con un acuerdo.

Todos los presentes, unos más que otros, teníamos algo que ganar y mucho que perder en el juicio.

Apenas me había sentado sentí una presión bastante fuerte en el costado derecho y una voz de mujer, muy agitada, me dijo a media voz, “si a mi hombre le pasa algo a ti te pincho”. Me volví para ver la cara de la señora y vi también la de un líder sindical al que siempre he tenido respeto y aprecio, que había acudido al juicio para dar apoyo a los trabajadores despedidos y las tijeras, bien grandes, que sujetas por unas manos temblorosas tenía apoyadas en mis riñones.

Decidí quedarme tranquilo. Pensé que difícilmente iba a pasar nada que pudiera irritar del todo a la mujer y que lo mejor era no enfadarla y dejar pasar el tiempo.

A lo largo de muchas horas las tijeras se mantuvieron pinchándome con más o menos fuerza. No hice nada por alejarme. Finalmente, cuando terminó la vista, nos fuimos a cenar y olvidé del tema.

Creo que lo único a lo que no tuve miedo aquel día fue a que me clavasen las tijeras,

En la locura de aquella jornada confirme la decisión que había tomado meses atrás, de no volver a despedir, aunque fuera con razón, a ningún trabajador. Desde ese día me convertí en un consultor.

Pasaron varios años y cuando en un acto social me encontré nuevamente con el líder sindical sentí una gran satisfacción. Nos dijo, mientras habábamos con el secretario general del sindicato: “José Luis, no sé si te podré perdonar nunca que te pasases el juicio tan tranquilo mientras que yo tuve que estar más de siete horas en tensión vigilando para que no me pincharan las tijeras, fue agotador.”

41. VISIÓN DE FUTURO

En 1955 se celebró la Conferencia de Bandung, en ella se pusieron los cimientos de lo que había de ser el movimiento de los No Alineados que tanta influencia ha tendido en la política internacional de la segunda mitad del siglo XX.

Durante los cursos académicos 1963 – 1964 y 1964 – 1965 participé, estupendo grupo de compañeros de ICADE en el seminario que sobre el Tercer Mundo dirigía el profesor D. Alejandro Muñoz Alonso, ya entonces un verdadero demócrata y una autoridad en Ciencia Política.

Durante los casi tres años en el seminario tuve ocasión de leer y discutir con mis compañeros los contenidos de la prensa diaria, libros y revistas de todos los colores ideológicos, desde Le Monde hasta la Revista de la Política Internacional de Yugoeslavia, desde The Economist hasta La Nueva África, publicaciones a las que teníamos acceso en la biblioteca del Instituto de Estudios Políticos, hoy del Senado.

Poco a poco, llegué a tener convicciones firmes, la primera de ellas era que la situación del mundo en la época era una locura, la segunda que los países No Alineados tenían toda la razón, que el comunismo de la Unión Soviética era terrible y que el capitalismo americano la fuente de muchos males. Mi conclusión, al final, era que el futuro debería ser y seguro que sería, un sistema sociopolítico a medio camino entre el comunismo soviético y el capitalismo americano, algo parecido al modelo autogestionario yugoeslavo.

Han pasado los años, del comunismo queda nada, de Yugoeslavia menos y el capitalismo parece que está triunfando de forma completa en el marco de la globalización.

Es evidente que no acerté en nada y tampoco me desagrada demasiado haberme equivocado.

40. UN CANDIDATO MUY CAPAZ

Una mañana me anunciaron que en la recepción de la empresa estaba el Sr. A, que había venido a verme y que solicitaba una entrevista con urgencia para tratar un tema muy importante. Bueno, me dije, recibiré al Sr. A.

Amablemente le pregunté, luego de ofrecerle un café, qué tema importante tenía que plantearme. Inmediatamente me dijo que él era la persona adecuada para ocupar el puesto de Director de la Fábrica de Aragón, que yo tenía su historial desde hacía dos semanas, que aún no le había llamado, que estábamos perdiendo el tiempo, que quería un buen sueldo y que cuando se incorporaba a su nueva función..

Según avanzaba su explicación, recordé que entre los historiales profesionales de los candidatos que tenía para el puesto sobre la mesa de mi despacho, en el paquete de los descartados, estaba el del Sr. A.

El historial era valioso e interesante, pero contenía serios indicios de que el candidato respondía a una cultura empresarial que muy difícilmente encajaba en nuestra empresa. Ello unido a que él residía a más de quinientos kilómetros, me había inclinado a no llamarle para una entrevista que, estaba casi seguro, era inútil para ambas partes.

Cuanto más hablaba él, más claro veía yo que el Sr. A. no era el hombre para el puesto. Además, me di cuenta de que era una persona muy golpeada por la vida y que yo no era quién para añadir un dolor adicional.

Dediqué cerca de una hora a escuchar sus éxitos, a aceptar sus virtudes y a justificar que aún siendo una persona muy preparada, que lo era, con una experiencia óptima, que la tenía, y unos valores extraordinarios, que sin duda poseía, el puesto de Director de la Fábrica de Aragón requería una persona con un perfil diferente.

Al final, cuando nos dependimos, me dijo, algo así como “¿Es esa su última palabra? Ya tendrá noticias mías”.

La entrevista me había impresionado tanto que la comenté con alguno de mis colegas y olvidé del tema.

Días después mi jefe, del Director General vino a mi despacho con una cara muy seria, me tendió un papel y me dijo, “por favor, lee”.

Se me hizo un nudo en el estómago, en el texto de aquella carta estaban transcritas literalmente muchas frases que indudablemente eran mías, además, estaban ordenadas de forma que se podía ver en ellas las muchas cualidades del Sr. A. y mi absoluto desprecio, mal trato e indudable falta de educación hacia la persona. Para colmo, denotaban una carencia completa de profesionalidad en mi comportamiento.

Cuando levanté la cabeza, creo que completamente pálido, vi que Nate me miraba, desde sus fríos ojos azules, con una espléndida sonrisa.

Me dijo entonces, “Ya te han hecho, sí, José Luis, son tus palabras, te ha grabado la conversación, me alegra mucho que salvo tú nadie en la empresa haya tenido ocasión de ver a ese loco”.

Yo me relaje y cuando me preparaba para explicarle, me cortó con gesto y me dijo, “José Luis, no te molestes, yo te creo a ti, no tengo ninguna duda, son tus palabras, pero yo te conozco a ti.”

Creo que pocas veces en mi vida he agradecido tanto unas frases como aún hoy sigo agradeciendo las que entonces pronuncio Nate Ottens.

Desde entonces tengo un enorme cuidado con lo que hablo con personas desconocidas y siempre que discuto algo importante para las personas mido no solo lo que digo, sino cada una de las palabras.

En caso de confrontación, las personas que te conocen, con pensar un poco, ya saben quien dice la verdad y quien tiene la razón. Claro que, como todos también sabemos, hay amigos que si tienen una oportunidad la aprovechan para matarte.

39. EL GRAN CONTRATO

A veces nos encontramos con oportunidades que nos hacen pensar que el nuevo contrato va a dar todo el dinero que se pueda soñar.

Un amigo, persona muy seria, nos pidió una propuesta para diseñar y poner en marcha una Central de Compras con la misión de adquirir todos los productos y servicios que requiere un país de África que está saliendo de una larga guerra.

Nuestro amigo nos dice que el Sr. A, personalidad muy conocida y resperada internacionalmente y hombres fuerte del Gobierno, pensaba que uno de los mayores males de su país era la corrupción y que para asegurar la eficiencia y la honestidad en el uso de los enormes que se requieren en la reconstrucción de una República mucho mayor que de España y con más habitantes, es imprescindible asignar todas las compras a un organismo autónomo, profesional y honesto.

La Central de Compras debía estar en Madrid por ser Europa. En París se habla francés, Londres tiene demasiados vínculos con Estados Unidos y Bruselas no es aceptable. España es el mejor lugar porque, además, el personaje tiene grandes vínculos aquí.

Estudiamos el tema, enviamos por correo electrónico un borrador de trabajo, muy acertado según nos dijeron, se convocaron, de mes en mes, varias entrevistas secretas que siempre había que posponer. El Diario Oficial aprobó el presupuesto y un día, por fin, se celebró la reunión definitiva.

El Sr. A. dijo que todo estaba muy bien, que el trabajo era extraordinario, que teníamos toda su confianza y la de su Gobierno, pero que el proyecto tenía que cambiar. Ante el asombro de todos explicó:

“Ahora lo importante es que busquen ustedes los productos de esta larga lista, que pacten el precio, su comisión y la mía y pasarme las ofertas. Aprobar las compras es mi trabajo.”

No aceptamos la propuesta. A nosotros, la verdad, no nos gustan estas cosas. No es fácil que algunas partes de África puedan progresar.

38. MIEDO

Una tarde de invierno, al llegar a casa abrí el garaje con la llave, esperé a que se cerrara la puerta y aparqué en mi plaza.

De repente, mientras cerraba el coche se encendieron las luces, busqué en mi cintura el revolver, que no llevaba, me sentí perdido y, sin dudarlo un instante, me tiré debajo del mercedes blanco que estaba al lado.

Estaba aterrado, me habían cazado. Dejé pasar un rato, no sucedía nada. Me asomé un poco y vi llegar al conserje preguntando qué me pasaba.

Cuando subí a casa, manchado del todo, mi mujer al verme tan sucio empezó a decirme algo, pero cuando me vio la cara, se echó en mis brazos, me apretó mucho y no dijo nada.

37. SEGUROS DE VIDA

Hace unos días me preguntaban qué pensaba yo de los beneficios extrasalariales en las empresas, añadiendo mis interlocutores que eran partidarios de pagar todo en sueldos e incentivos, dejando que cada empleado gastase su dinero en lo que considerase más conveniente.

Sin entrar en la discusión, que puede ser larga y muy compleja, creo que hay algo que cualquier empresario y cualquier directivo, con mando sobre personas, tiene que tener muy presente, son los seguros de vida y de accidente.

No ocurre nunca, pero cuando ocurre puede ser tremendo decirle a la viuda, al viudo o a los hijos, que en la empresa no hay nada de nada, que para eso está la seguridad social.

Es cierto que cada cual puede gastar su dinero en lo que quiera, pero por la propia tranquilidad es muy importante tener, además de lo legal, un buen seguro de accidentes y, a poco que quepa en los presupuestos, un razonable seguro de vida para el personal.

A lo largo de mi vida he ido contratando seguros para el personal de las empresas en las que he trabajado y, la verdad, gracias a haberlo hecho, los malos ratos que he pasado, que no han sido pocos, han sido un poco menos malos.

36. LA MUJER MUERTA

Aunque no cientos, seguro que a lo largo de mi vida he visto muchos muertos y, curiosamente, nunca he sentido ningún miedo.

Con una excepción, “la mujer muerta”, a la que nunca vi, ni viva ni muerta, pero que ha estado presente en mi memoria desde que supe que había muerto, hace más de cincuenta años.

Un día soleado, probablemente de primavera, llevaron a casa, mi padre era médico de un pueblo por el que pasaba la carretera de La Coruña, a una mujer víctima de un accidente de tráfico.

El escándalo era tremendo. El jardín, la terraza, y la sala de espera de la consulta se llenaron de gente. Guardias civiles, interesados por el caso o simples curiosos hablaban muy alto, explicaban cosas, y hacían ruido, mucho ruido.

Mi madre ordenó y sus instrucciones se cumplieron inmediatamente, que llevaran a todos los niños, éramos muchos, al cuarto de estar, y nos puso a rezar el rosario para pedir a Dios por la mujer, para tenernos quietos y, probablemente, para callar su propio miedo.

En un momento determinado alguien dijo “se acabó, se ha muerto”. Y como, por ensalmo la casa, la terraza, el jardín y las calles próximas se vaciaron de gente. No quedó nadie.

Como lagartos al salir el sol, los niños empezamos a salir de casa, pero no nos alejamos demasiado de la puerta de la cocina, nos dijeron que “la mujer muerta” estaba en el garaje, esperando a que vinieran a por ella.

Al cabo de mucho rato vino el transponte que había en el pueblo para estos casos, el carro de la basura, que arrastrado por un caballo y conducido por El Chabolo, se llevó, lo vimos de lejos, el cuerpo de la mujer muerta.

Recuerdo todavía cómo nos acercamos al garaje, cómo entramos a hurtadillas y cuánto nos sorprendió que no hubiera nada.

Pero lo cierto es que no habiendo nada, aquel enorme garaje se lleno, para siempre en la memoria de todos los hermanos, de “la mujer muerta”.

El carbón y la leña de la caldera, el coche de Padre, las bicicletas, los trastos viejos, se guardaban en el garaje. Todos los hermanos entrábamos allí, hacíamos lo que hubiera que hacer, sentíamos a la “mujer muerta”, pasábamos nuestro miedo, salíamos rápidamente y olvidábamos el mal rato.

Años más tarde cambiamos de casa y creo que lo mejor de la casa nueva era que no tenía la presencia, real o en nuestra memoria, de “la mujer muerta”.

35. HOMBRES, MUJERES, ENGAÑOS Y ESAS COSAS

Mi madre dice que su suegra decía “hija, pide a Dios que tu marido no te engañe, que si te engaña no te enteres y si te enteras, que no te importe”.

La abuela nació, aunque en el último tercio, en el siglo XIX. Mi madre, mucho más joven, en el primer tercio del XX.

Las dos, mujeres cultivadas, dirigían sus casas, leían, educaban a sus hijos, tenían buenos maridos y estaban al tanto de cuanto sucedía en la sociedad. No eran personas incultas, ni carecían de la capacidad de pensar con libertad.

Sin embargo, las cosas que podían pensar o decir eran propias de otras épocas y, para quienes en estos tiempos comienzan a vivir sus matrimonios, probablemente, tonterías de las abuelas que no vale la pena escuchar.

Yo, por el contrario, que vivo en el siglo XXI, cuando al menos el diez por ciento de los hijos, aunque sus padres lo ignoren, no son sus hijos, el matrimonio que se mantiene es el segundo o el tercero y la fidelidad conyugal no es un valor socialmente compartido, estoy seguro de que el dicho, tantas veces repetido, de mi abuela y de mi madre, con un pequeño ajuste formal, debería estar grabado con letras de fuego, en la mente de todos.

La vida tiene momentos buenos y menos buenos, los matrimonios pasan etapas duras, la infidelidad está dentro de lo que cualquier día a los hombres o a las mujeres les puede pasar, pero si el otro no se entera, las cosas se pueden arreglar.

No digo que haya que engañar al marido o a la mujer, pero que si sucede, el otro, salvo que cualquiera de ellos haya decidido romper el matrimonio y volver a empezar, es mejor que no se entere, si se entera, lo más probable por múltiples razones, es que el matrimonio termine casi ya.

Y, destruir un matrimonio, salvo excepciones, en el mejor de los casos es, para todos, un mal que debemos evitar.

34. LAS CONTRAOFERTAS

Con relativa frecuencia me preguntan qué se debe hacer cuando tu jefe, al recibir la noticia de que te marchas a otra parte con una buena oferta, te hace una contraoferta que puede desde casi igualar a superar con mucho la recibida del exterior.

Mi respuesta es siempre la misma: Si la oferta es buena, supone un desafío y te atrae lo suficiente, en principio, por muy buena que sea la contraoferta, debes marcharte.

Obtener algo valioso bajo presión se percibe, consciente o inconscientemente, siempre como una victoria en una batalla sobre el otro, y nunca como un acuerdo entre iguales.

Al mismo tiempo, dar para no perder lo antes no ofrecido e incluso denegado, deja en un poso de resquemor, que antes o después se trata de recuperar con buenos intereses.

Si aceptas la contraoferta estas perdiendo una oportunidad, que habías ganado por tu valía, nadie te la había regalado. Además, ¿Qué vas a hacer cuando te llegue otra oferta?, ¿Hasta cuando llega tu compromiso? ¿Cuánto tiempo va a pasar hasta que tu empresa considere que has pagado el precio de haberte quedado?

Si no la aceptas y la agradeces en todo lo que vale, puedes quedar como un amigo y, sobre todo, como un señor. La vida es larga y arrieritos somos que antes o después nos encontramos en los caminos.

No, la verdad es que nunca he aceptado contraofertas, he visto demasiadas cosas como para no estar seguro de que es un gran error aceptar la contraoferta y, en mi opinión, para evitar ese error, lo mejor es evitarlo y nunca hacer a nadie contraoferta.

Claro que puede haber excepciones, seguro que muchas, sin embargo solo conozco un caso en el que las dos partes, pasado el tiempo, no hayan tenido la sensación de que al hacer y aceptar la contraoferta cometieron un error.

33. LOS NOVIOS REGRESAN PARA CASARSE CON SU NOVIA FORMAL

Durante años y años, en todas partes, cuando una joven tenía novio formal y este se marchaba al servicio militar y estaba muchos meses, incluso años, alejado de ella, lo pasaba, dentro de lo malo, relativamente bien. Tenía la seguridad de que pasado un tiempo él regresaría ya dispuesto para el altar.

También, durante años y años, los muchachos que tenían novia en su pueblo, cuando ellas salían para trabajar en la ciudad, si escuchaban a sus madres, tenían claro que con esa novia no se iba a casar.

Ahora no tenemos el servicio militar pero, por unas u otras razones, tanto los chicos como las chicas salen de sus ciudades, se van a otras partes a estudiar o trabajar y en lo de volver para casarse las cosas siguen exactamente igual.

He observado que las chicas, cuando se marchan lejos, desde casi el primer día, mientras añoran su casa, su novio formal y su ciudad, se ponen a festejar.

En muy pocos meses consiguen otro novio y, andando el tiempo, con mucho dolor, si el nuevo madura, dicen al otro que es una pena, que lo sienten mucho, pero que aquello ha salido mal.

No importa que el novio sea alto o bajo, muy listo o un poco menos, trabajador o un golfo, del gusto de la familia o la reencarnación del mal, lo que ha encontrado lejos es para ella el ideal.

Los chicos, en cambio, siempre están mirando atrás. La chica que les espera en el pueblo es su novia formal y tienen claro que a ella van a regresar. Pueden conocer a muchas otras, pero es casi imposible que se lleguen a casar con otra que no sea la que dejaron allá.

Esto que comento no es una ley que pueda probar, es solamente la visión parcial de quien ve todos los días cómo las chicas, con su novio lejos, se visten de pretender, lloran las lejanías y salen a “ligar”. Y al mismo tiempo, felicita de corazón los chicos que, con inmensa alegría, dicen que en España han terminado, que vuelven a casa y que en unos meses, con su novia de siempre, se van a casar.

Como es lógico, nada de lo que ocurre me parece mal. Todo, en última instancia, es dar a la vida una nueva oportunidad.

32. YO SOY MUY SINCERO

Hay personas, jóvenes, adultas e incluso mayores, en todas los entornos sociales, que siempre tienen en la boca la expresión “yo soy muy sincero, digo las cosas como las pienso”.

Tienen además una notable habilidad de ver en los demás aquello que no es precisamente lo mejor de las persona y de aprovechar cualquier oportunidad para recordárselo.

Si la amiga tiene una fiesta y, con especial cuidado, se está vistiendo de pretender, la madre o la amiga le puede decir “no te molestes, con esa nariz torcida no tienes arreglo”.

O, “ Aunque te pongas ese vestido, Juan es mucho para ti, con lo guapo que es, seguro que lo pesca otra”.

“No se para qué te gastas el dinero en pagar un colegio tan caro en lugar de comprarte cosas, el mayor de tus hijos es tan listo que no lo necesita y el segundo tan tonto que no lo va a aprovechar.

“No se para que preparas esa oposición, hay que estudiar mucho durante mucho tiempo y tu no lo vas a conseguir. Mira, mi sobrina Paquita se hizo Juez en veinte semanas, pero ella sí que es lista”

Lamentablemente, estoy seguro de que cualquier persona que lea esta reflexión puede citar muchos y mejores casos de “personas sinceras” y creo que a nadie le gusta tanta sinceridad.

Realmente estas personas no son especialmente sinceras, son solamente envidiosas y mal educadas que carecen de la habilidad necesaria para ocultar su envidia. Son personas que están tan enfadadas con ellas mismas por no tener todo lo bueno que tienen lo otros y , para compensarse, fastidian cuanto pueden.

Lo siento. No me gustan las personas tan sinceras. Prefiero a otras, menos sinceras, y mejor educadas, que tratan de hacer la vida amable a quienes les rodean, o, al menos, procurar no molestar.

31. ISLAMISMO RADICAL

Que los islamistas radicales aspiren a recuperar España es normal, está dentro de su memoria colectiva.

Pedro de Valencia, persona moderada en su época, en sus comentarios sobre la expulsión de los moriscos en 1609, nos dice, después de explicar las diferencias con los cristianos, lengua, vestido, cultura y religión, que lo más importante de cuanto los separa es que ellos “entienden que toda España es suya y les pertenece por el título más legítimo y fuerte que ellos pueden imaginar, que es por haberla ganado por las armas en demanda de la propagación de su secta y en obediencia de su profeta”.

Al final, para los miembros de esta cultura el ganar por las armas es el título más legítimo y fuerte para poseer la tierra.

Felipe III expulsa entre doscientos cincuenta y trescientos mil moriscos, cerca de un cuatro por ciento de la población española en los comienzos del siglo XVIII.

Las razones de la expulsión fueron básicamente cuatro, la primera de ellas la animadversión de las clases más bajas de la población cristina, la presión de la Iglesia, los intereses económicos y, acaso la más importante, el miedo siempre latente al enemigo islámico de la población.

Estamos ahora en un proceso que puede suponer un serio incremento del miedo entre la población española y europea, a largo plazo, puede surgir la exigencia de una nueva expulsión.

Espero que no sea así, pero si sucede, pagarán los más débiles y la culpa no será exclusivamente de los cristianos.

30. NO SE DEBE AMENAZAR, ES MUY PELIGROSO

Convivir no es fácil. Es tan difícil que el Primer Mandamiento de la Ley de Dios nos dice “... y amar al próximo como a ti mismo”

Y algo que perturba la convivencia entre los próximos es la amenaza. Amenazar y ser amenazado es demasiado normal entre los hombres desde que el mundo es mundo.

Cuando se amenaza se hace, creo que siempre, para doblegar el ánimo de la otra persona, para someterla a la propia voluntad, en última instancia, para que el otro sepa o recuerde que el poder es de quien amenaza.

La amenaza es una muestra de desamor.

Normalmente la amenaza consiste en advertir que se va a producir al otro un daño, que sabemos le puede asustar lo suficiente para que se someta. Y, curiosamente, para asustar se usan aquellas cosas que a quien amenaza realmente le asustan.

Y claro, el otro, a poco que escuche, puede ver muy bien oportunidades para producir auténtico daño a quien le ha amenazado.

Por tanto, no hay, en principio y sin haber pensado muy bien en las consecuencias, que amenazar al otro.

Un ejemplo:

Hace algunos años me encontré con un jefe, muy capaz pero “muy bruto”, con genio brusco y maneras regulares, que tenía asustados a todos sus colaboradores.

Una tarde, en su despacho, por un motivo que no recuerdo, me dijo algo así como “a mi nadie me siega la hierba bajo los pies, si lo intentas te despediré”.

La verdad es que su amenaza determinó su propio futuro, hasta ese momento mi preocupación era el lograr que esa persona fuera un mejor líder dentro de la organización. No se me había ocurrido que, pese a su posición, le despedir.

Tardé poco más de tres meses en lograr que esta persona saliera de la empresa. La idea no fue mía.

29. CARNET DE CONDUCIR

En estos se habla y lamenta mucho sobre las muertes en accidentes de tráfico.

Se culpa al mal estado de las carreteras, a su trazado, al mal tiempo, a la antigüedad de los coches, a la falta de policía y a la imprudencia de los conductores.

Se discute el éxito del carnet por puntos y de la campaña del gobierno para asustar a los conductores.

Lo mismo que siempre.

Pienso que una posibilidad no contemplada hasta ahora es la de bajar a los doce o catorce años la edad para conducir. Enseñar a los chicos en la escuela a usar el coche como algo normal, lo mismo que a saltar los aparatos en Educación Física, coser, o a hacer en Tecnología uno de esos espantos, carentes de utilidad inmediata, que encienden una luz.

Acaso si se enseñase a conducir muy bien a los jóvenes, siendo casi unos niños, la situación actual podría cambiar.

Bien es verdad que los resultados se obtendrían a largo plazo y eso, para quienes gobiernan, no tiene prioridad.

28. COMUNICACIÓN EN LAS ORGANIZACIONES

Es un axioma que las empresas son como pueblos, todo se sabe. Cundo se dice que no hay o no funciona la comunicación lo que se está diciendo realmente es que la información no fluye por los canales adecuados o no llega en el tiempo preciso.

Para incrementar la calidad de la Comunicación Interna en los últimos años se está impulsando el desarrollo de páginas Web en las áreas de Recursos Humanos que, cada vez mejor estructuradas, ofrecen información y más información, pero que realmente aportan lo mismo que aportaban los medios tradicionales con, a veces, mayor fluidez.

Mi opinión es que la preocupación por la página Web de Recursos Humanos debería ser marginal, el mayor esfuerzo de los responsables de Comunicación Interna en las organizaciones debería ser el estímulo y el apoyo real a todas las unidades de la estructura para que ordenasen razonablemente los archivos que usan en su trabajo habitual y los mantuvieses abiertos, con las adecuadas precauciones, a quien libremente quiera consultarlos.

La información importante es la que uno necesita y por ello lo mejor sería facilitar a quien tiene la necesidad, la oportunidad de satisfacerla. Me parece que no vale la pena emitir lo que a cada uno le parece interesante sin dejar que sea el cliente, el otro, el que pueda elegir, sobre todo cuando hay tan poco tiempo y tanto que leer.

En resumen, creo que debemos pensar que el mundo es cada vez más diferente de lo que era ayer, y que ya no es necesario enseñar o lucir nuestro producto, sino hacer que quien tiene una necesidad piense en nosotros y quien quiere una información sobre lo que nosotros hacemos o tenemos, sepa llegar rápido a nuestras computadoras y, esto lo trataremos otro día, que permanentemente le estimulemos para que venga a visitarnos.

27. CINCO CONTACTOS SON SUFICIENTES

Una gran preocupación y motivo principal para no avanzar o perder oportunidades, es el no saber quien es, donde está y como llegar a la persona que puede estar interesada en la idea, el producto, el servicio o el proyecto que tenemos en las manos.

La realidad, por el contrario, es que si la idea o el proyecto es lo suficientemente sólido, encontrar al interlocutor es relativamente sencillo. Bastan normalmente cinco contactos.

Si se piensa bien en la persona con la que puedes hablar del tema para podérselo explicar tanto como sea preciso y se le pide un primer contacto con alguien que sepa quien es o como llegar a la persona adecuada.

Del segundo contacto se pasa al tercero y rara vez es necesario llegar al quinto para estar en presencia física o, al menos, telefónica, con el interlocutor final.

Hay un axioma: Llegar a cualquier persona en cualquier parte del mundo requiere no más de siete contactos.

He comprobado el aserto para cuanto he necesitado, desde pedir informes en Argentina sobre un candidato para un puesto de gerente de contabilidad en Valencia, buscar materiales de construcción en Chile, localizar expertos en software en Inglaterra o conocer a políticos de la República del Congo. Funciona y normalmente se tienen buenos resultados.

En todo caso, el factor que limita o estimula el uso del sistema es el disponer de un número, lo más amplio posible, de contactos directos. Por ello es imprescindible construir una buena red de relaciones personales, cuidarlas, y estar siempre dispuesto a ser un buen apoyo para quien te pide algo. Si lo haces es seguro que llegas al final, si no lo haces lo más probable es que no logres mover ni al primer contacto.

Otra cosa, Internet puede ser una ayuda, pero para llegar a alguien, aunque sepas quien es y donde está, si no le conoces personalmente, es mucho mejor el sistema de los contactos que perder el tiempo navegando por la red.

26. SABER ACUMULADO

Ya no me sorprende tanto como hace unos años, pero me sigue asombrando el enorme saber acumulado en la sociedad.

Desde niño tenía claro que para ser médico o abogado era imprescindible dedicar largos años al estudio en la universidad y más tarde seguir estudiando para llegar a ser un buen profesional.

Luego supe que para ejercer cualquier oficio serio, ingeniero, químico, historiador o veterinario, también era imprescindible estudiar mucho.

Años más tarde, cuando comencé a trabajar en la Industria descubrí lo complejo que era llegar a Maestro en cualquier oficio.

Hoy sé que cualquier actividad, para tener demanda, requiere de un enorme saber, los zapatos, las lámparas, los teléfonos, pintar paredes, poner ladrillos, vender algo exige un enorme saber.

Y, me pregunto también, ahora que todo se está normalizando, que la acumulación de conocimientos se está concentrando en las actividades que son rentables en cada momento, donde se va a conservar el conocimiento acumulado de las viejas profesiones.

Algunas veces pienso que habría que crear el Museo del Saber Acumulado y de los Oficios Perdidos. Es posible que en el futuro, cuando los jóvenes busquen su profesión o haya que hacer algo muy nuevo, será interesante acudir al Museo.

25. CARTA A MI AMIGO JOSE

Mi amigo Jose tiene un blog en Libertad digital, su dirección es:

http://blogs.libertaddigital.com/spinoza/

Ha publicado el pasado viernes un artículo que titula DESPEDIDA Y CIERRE. Como es un muy buen amigo le he escrito un correo electrónico que bien puede ser hoy la aportación a mi propio blog. Dice así:

Jose

Como por algún motivo que desconozco el blog no me admite la contraseña, tengo que mandarte este correo en lugar de colgar el comentario en LD.Tienes bastante razón, pero lo que ocurre hoy es normal en España, así somos los españoles:

• Padilla, Bravo y Maldonado son los héroes de sus ciudades y tienen calles en Madrid por su oposición al Emperador.
• El Conde Duque de Olivares tuvo todos los problemas con los Mercaderes de Aragón y con todos los que no fueren Castilla.
• Hidalgo, Bolívar, San Martín, Santa Cruz o Martí eran tan españoles como lo son mis tocayos de la periferia o mi pariente del talante.
  El exilio ha sido compartido por todos durante casi dos siglo
• El ratito de orgullo que hemos disfrutado hace cuatro días ha sido la visión fugaz que nos ha ofrecido el Dios o el Diablo para animar a unos y a otros a avanzar por un camino, cada cual el suyo, para conseguir un mañana mejor.

Pero, los españoles también somos hijos de la lucha, de la resistencia ante la adversidad, de las victorias cortas, del éxito relativo y, sobre todo, del no desfallecer.

Entiendo que quieras despedirte, nos pasa a casi todos. Yo incluso animo a mis hijos a marchar a otros lugares más cercanos al Centro del Mundo, a emigrar hacia otros futuros si nuestros compatriotas se deciden a elegir la sedación primero y luego la muerte de España.

Pero, por el momento, me parece que tienes que seguir escribiendo. Lo haces bien y es bueno que todos sepamos que somos muchos y que entre nosotros hay personas muy capaces en las que apoyarnos para conseguir el éxito que, evidentemente, como somos españoles, nos durará otro ratito pero que para mí, al menos, es suficiente.

Un abrazo

José Luis

24. PAZ

Cuando reflexiono, en días como hoy, sobre la vida y la muerte, siento con enorme fuerza en mi interior el deseo de Paz.

Creo que la necesidad profunda de tener y sentir Paz, de estar llenos de Paz está grabado, cada generación más fuerte, en los cromosomas que mantienen la vida, difícil hasta casi lo imposible, de los hombres, en cada momento vivos.

Nadie en la historia de la humanidad ha vivido y sentido, más allá de algunos instantes la Paz.

La Paz es un bien maravilloso e inalcanzable que ayuda a sobrevivir. Sobrevivir requiere vivir una guerra muy prolongada, que solo termina cuando ya sin fuerza para sostenerla se cede a la muerte. Así está hecha la naturaleza, así se está haciendo la evolución y así ha de morir la viva.

Se vive en continuada competencia con el ambiente, con las personas, con nosotros mismos. Se batalla para tener el marido o la mujer, se lucha para defender y alimentar a los hijos, se trabaja para tener poder o para resistir al otro poder, se vive para sobrevivir y la supervivencia no se logra con paz.

Creo que deseamos tanto la Paz porque en nuestros genes se ha ido marcando como signo imborrable del ser humano. La Vida ha incorporando a nuestros cromosomas las no muchas vivencias de paz y la gran necesidad de ella que han tenido nuestros padres, nuestros abuelos todos los que no precedieron en la vida..

Al final de la reflexión, al igual que hoy, casi siempre llego a la conclusión de que el deseo de Paz es un estímulo muy poderoso, acaso vano y fugaz, que la Vida ha creado para asegurar la vida.

A fin de cuentas, nosotros, yo, a pesar de todo, con unos pocos momentos de Paz que vislumbremos tenemos recompensa suficiente para seguir en la guerra.

23. FUMAR ES MALO PARA SALUD, PERO PUEDE SER MUY BUENO PARA OTRAS COSAS.

Fumar es malo para la salud, Fumar ahora es muy malo para la imagen social. Fumar es malo para todo. Pero yo, por ahora pienso seguir fumando.

Me gusta fumar, pero sobre todo me gusta la relación con otras personas que produce el hecho de ir a fumar y me encantan las tertulias de los fumadores.

Ahora, que no se puede fumar en casi ninguna parte es normal ver en las puertas de los comercios, en las entradas de los grandes edificios, en los jardines de acceso a las fábricas, en cientos de lugares al aire libre, grupos de personas que están fumando.

El mucho trabajo y la tensión que este genera hacen que en muchas organizaciones apenas haya tiempo para hablar con tranquilidad sobre esos mil temas banales que parecen sin importancia pero que la tienen toda en la construcción de las relaciones interpersonales. Ya no hay tiempo para comentar el partido del domingo, las cualidades de un pretendiente, el nuevo trabajo del marido, las maldades de los jefes, las virtudes de los hijos, las ilusiones de promoción o el interés de un libro. Ya en las fábricas o en los despachos solamente se puede trabajar.

Solo se puede hablar con tranquilidad mientras se está fumando a pisos de distancia del ordenador o a muchos metros de la caja o del mostrador. Mientras se recorre el camino hasta el lugar permitido para fumar las personas se relajan, abren su mente a la normalidad y, cuando llegan, están en condiciones de hablar.

Entre los fumadores se transfieren retazos de información y se desarrollan poco a poco vínculos impensables en el trabajo normal pero que, curiosamente, son más tarde o mas temprano, extremadamente útiles para progresar.


Incluso, cuando viajan a otras ciudades y visitan otras empresas o a otros miembros de su propia empresa, como tienen que fumar, conocen a personas que normalmente permanecerían desconocidas y que les abren sus brazos, sus mentes, su alma un poco, al reunirse para fumar.

El mundo de las reuniones para fumar es abierto, limpio, sin competencia, de personas que comparten algo importante, fumar. Las personas que comparten el terrible vicio de fumar se transforman entre ellas en un club extraordinario en el que ninguna persona sensata, después de conocido, puede dejar de estar.

No, no pienso dejar de fumar.

22.ACTITUDES POSITIVAS. LA PAZ 1970

No. No, aunque esta casi terminado, no puedo seguir ahora con el tercer ejemplo de actitudes vinculativas de igualdad que llevan a buenos resultados.

Relataré en su lugar uno de los mayores errores, consecuencia de la carencia de esas actitudes, por el que siento mayor vergüenza y que más me ha hecho aprender.

La Paz. 1970. Son las 11 de la mañana de una día soleado. Los jardines de la Universidad están realmente preciosos, lo recuerdo bien.

En el Consejo Académico, o acaso en una reunión preparatoria para ese Consejo, se trata sobre la sustitución del Doctor Francisco Nadal, impulsor del nacimiento de la UCB, su primer y único Decano hasta ahora, que ha planteado su renuncia irrevocable.

Hay tensión. Se habla de generalidades pero poco a poco parecen perfilarse dos opciones, de una parte el Doctor Alberto Conesa, Director del Departamento de Sicología, de otra el Doctor Huascar Taborga, también Director de Departamento, gran estudioso, muy prudente, con una gran humanidad y, lo sé bien, buen amigo.

Hay razones para optar por cualquiera de ellos, pero la opción que parece más perfilarse es la del Doctor Taborga.

Sin encomendarme a Dios ni al diablo comencé a hablar. Lo hice con gran seguridad y soltura. En menos de cinco minutos habían salido de mi boca todas las cosas que cualquier persona debía mantener bien calladas salvo que este muy interesada en ganarse un montón de enemigos.

Comenzado por mí mismo fui repasando las figuras de todos los asistentes y enumerando las razones por las que ninguno era la persona adecuada para el puesto. Todos éramos malos candidatos, pero de entre tantas malas opciones las menos malas eran el Doctor Taborga y el Doctor Conesa. Por ello mi voto era, me parece recordar, para el Doctor Taborga.

La decisión final, creo del Rector o acaso de la Conferencia Episcipal, no lo recuerdo, fue el nombramiento del Doctor Huascar Taborga como Decano.

El Doctor Taborga , durante los meses que ocupó el cargo, antes de pasar a ser Ministro de Educación y más tarde Canciller de la República, hizo una gran labor como decano de la Universidad.

Hoy se bien que el Doctor Huascar Taborga es uno de los más grandes hombres que he conocido a lo largo de muchos años en el mundo de la educación, la política y la sociedad a lo ancho de todo el mundo.

Huascar fue bueno conmigo, jamás me hizo reproche alguno, me respetó siempre a pesar de mi ignorante prepotencia y, a pesar de mi estúpida soberbia, tuve el honor de seguir colaborando con él, tanto en la Universidad como en su gestión, siempre muy difícil, en la política boliviana.

Como Huscar Taborga, Alberto Conesa y el resto de mis colegas de la Universidad eran mucho mejores que yo, me perdonaron la desafortunada intervención y me dieron la gran lección de saber aprovechar mis cualidades, aunque en muchos temas fuera un incapaz.

Hoy se muy bien que, como lo he hecho cientos de veces después de aquello, entonces debería haber resaltado las virtudes de todos los presentes y dado gracias públicas al cielo por contar, para sustituir a Pancho Nadal, no solo con dos personas tan capaces como ya eran Huascar Taborga y Alberto Conesa sino tener además todo un elenco de muy buenos candidatos en el seno de la Universidad.

21. AMPURIA BRAVA 1991

Ampuria Brava. Las 9 de la mañana, primavera de 1991.

Hace apenas cuatro minutos que ha comenzado un Curso de Formación sobre el Rol del Directivo. Los asistentes con mandos de la red de oficinas del uno de los primeros bancos españoles en Cataluña.

Se han presentado a los demás los dos primeros asistentes cuando antes de comenzar el tercero se levanta una voz que denota gran enfado.

“Esto es una vergüenza, nos quieren lavar el coco, llevan años prometiendo y dando nada“Este hotel es una porquería, seguro que la comida detestable, esta sala es repugnante”

“ Tú eres como ellos,...”

Las palabras suenan cada vez con mayor violencia y se ve que entre el resto de los participantes comienzan a aparecer señales de asentimiento. Cuantas más cosas saben de los labios del orador más oportunidades tenemos de escuchar cosas en las que puede tener razón.

Callado, escucho sin interrumpir para nada. Sé que si me enfrento con el asistente enfadado todo puede ir a peor y que probablemente lo que es por ahora un pequeño incidente puede dar lugar a un problema.

Sin decir nada, mientras el continúa las protestas, me agacho y con mucho cuidado me meto debajo de las faldas que cubren la mesa del ponente. Se siguen escuchando las voces y yo muy quieto sigo debajo de la mesa. En pocos segundos no se oye nada en la sala, podría parecer absolutamente vacía. Dejo que se escuche el silencio unos instantes y luego el brazo, solo el brazo, con un pañuelo blanco en la mano de debajo de las faldas, lo agito, digo ¡Paz, Paz, Paz!, una gran carcajada relaja en ambiente, salgo, me pongo en pié con una sonrisa, y el autor de la gran protesta también se ríe.

A partir de ese momento todo fue normal y desde entonces tengo un amigo, muy aficionado a las motos, que cuando de tarde en tarde nos encontramos me recuerda que el mejor medio para apagar una crisis no es el enfrentamiento.

COMIENZO DEL BLOG Y 20 REFLEXIONES

EL COMIENZO

Hoy, 7 de marzo de 2007, comienzo a escribir en este blog.

Su objetivo es aportar reflexiones que puedan ser útiles a algunas personas, especialmente a mis alumnos, sobre experiencias obtenidas en el transcurso de la actividad profesional y en la incidencia que éstas han tenido en la vida personal.

Los temas hoy están abiertos, son múltiples las ideas que pueden incorporarse a estas notas y probablemente hay otras muchas que aparecerán, sin ser esperadas, en el transcurso del tiempo.

1. POR QUÉ

Cuando eres muy joven escribes un Diario para no olvidar las cosas que haces o te suceden.

Cuando empiezas a vivir dejas de escribir porque estas muy ocupado en hacer y en vivir. Lo máximo que haces es anotar en la agenda, si hay muchos, los temas que hay que hacer y no puedes olvidar.

Cuando empiezas a ser mayor la agenda es imprescindible no olvidar, pero piensas que no es suficiente, que hay que escribir para asegurar la trascendencia, lograr que otras personas usen o disfruten de tu pensamiento y, sobre todo, para estar presente en la vida a través de quién te pueda leer.

2. LO MÁS IMPORTANTE ESTÁ FUERA

Lo más importante para las personas está fuera de ellas. El amor, el odio, las pasiones todas tienen un objetivo que esta en el exterior.

Lo más importante para las empresas está fuera de ellas, son sus clientes.

Lo más importante para un partido político son los votantes, que están también en el exterior.

Me pregunto por las razones para estar siempre mirando hacia dentro y aunque las encuentro me parecen pobres e insuficientes.

3. LA PERSONA PROMEDIO

Todos sabemos que no existe la persona promedio, pero actuamos como si esa persona fuera una realidad incuestionable.

Cada día avanzamos para hacer más precisa la descripción de esa persona. Peso, altura, ancho de hombros, tamaño de las manos, peso, edad, educación, hábitos de consumo, familia, lugar de residencia, actitudes, poco a poco se incorporan cientos de datos que matizan el modelo.

Y en nuestros comportamientos, cuando queremos comunicarnos, cuando pretendemos llegar e influir en otras personas, en lugar de buscar su individualidad, nos lanzamos a la acción usando fórmulas acertadas para la persona promedio, para esa que es resultado de las estadísticas y que no existe.

Desde los partidos se dirigen a "los votantes", desde las empresas a "los clientes", desde el púlpito a "los feligreses" y desde las propias personas que quieren conocer o tratar de forma correcta a otras personas se cae en el error de comportarse como habría que hacerlo con la persona promedio.

Ya se que existe la segmentación, ya se que cada vez se impulsa con mayor fuerza el marketing relacional, ya se que como todos queremos hacer las cosas cada vez mejor, buscamos y tratamos de dar trato más adecuado a cada persona individual.

Pero estamos muy lejos de ser personas que tratan a cada uno de los próximos simplemente como personas. Acaso para influir o nos influyan retrocedamos en el terrible error de pensar que sí existe la persona promedio

4. LAS DOS ESPAÑAS

Ayer, 10 de Marzo de 2007, estuve con mi mujer en la manifestación convocada por el Partido Popular contra la política antiterrorista del actual Gobierno.

Independientemente de los resultados, estoy seguro que muy cortos, del evento, no dejé de pensar durante los casi doscientos minutos que duró, en la tremenda historia de las dos Españas, una de las cuales construye y la otra destruye, siendo en opinión de cada una de las partes la otra la que destruye.

Pero, creo que la realidad de las dos Españas es similar a la de las dos Francias, a las dos Alemanias, a las dos Bolivias a los dos Chiles o a las dos Rusias.

Es la misma situción que la del lmperio Romano de Oriente y el de Occidente, el Imperio Español y el Inglés, o el de Occidente de Estados Unidos frente al ya muerto de la Unión Soviética.

Y, es sin duda similar la pugna de las dos familias que sacrifican casi todo y ponen en peligro su supervivencia por borrar del mapa a la familia enemiga con la que convive en el mismo pueblo día a día.

Las personas luchan frente a las personas para estar un poco por encima de las que están más próximas aunque a la vista de los demás no deje de ser ridículo.

No, no pienso que esto sea expresión de la visión de Hobbes. No, creo que la idea de las dos partes enfrentadas está en la semilla motor de la evolución, en la base de nuestros genes. Para crecer es imprescindible el inconformismo, es necesaria la demanda de cambios, es necesario que haya competencia.

Y, me parece que al final el progreso es inexorable, siempre los que ganan dejan vivo algo de los que pierden. Se puede conseguir ocultar la obra y el pensamiento de los otros durante un tiempo, a veces mucho, pero antes o después renace y, en muchos casos, triunfa nuevamente.

Por eso, quizá haya que admitir que luchar por las propias ideas en bueno, ganar muy bueno, pero no importa, a la larga, demasiado si tu también pierdes.

Por ello creo que lo mejor es mantener muy clara esta perspectiva, el tiempo corre más que la vida humana y muchas veces nos quedamos con la percepción de haber triunfado o triunfado menos en la vida cuando esta se acaba y, posiblemente el éxito es siempre relativo

5. LOS IMPORTANTES NO SOMOS NOSOTROS

Afirma el P. Marcos, predicador dominico, que todo cuanto hacemos negativo hacia los demás se vuelve contra nosotros mismos y que, por el contrario, cuanto hacemos en pro de los demás redunda en nuestro propio beneficio, y añade que la voluntad es ciega y se inclina siempre por aquello que el conocimiento le ofrece como mejor.

Si tiene razón el P. Marcos, que creo que sí la tiene, comprendo un poco mejor el por qué cuando se tienen años se ven las cosas con mayor claridad, el sentido común está mucho más presente y se tiende a hacer las cosas pensando un poco más en los demás.

Cuando la soberbia, va dando paso a un principio de humildad, la pereza se hace monotonía y el resto de las pasiones para ponerse en marcha requieren un esfuerzo mayor del que es viable. Las verdades se hacen simples y sencillas y la acción se traduce en mayor bondad..

6. LA RESISTENCIA AL CAMBIO

Se dice que las personas tenemos una gran resistencia al cambio. Yo no lo creo en absoluto.

El ser humano es fruto de la evolución, del cambio permanente y si en nuestros genes está inscrito el cambio es imposible que exista hacia el una gran resistencia.
Algunos ejemplos próximos: De no existir la radio hemos pasado a ver la televisión por cable, de no usar el teléfono a llevar un móvil, de ir en carro a viajar en avión, de usar plumilla a escribir en el ordenador.

Lo que se llama resistencia al cambio es el resultado de la percepción individual ante los posibles efectos del cambio en la situación de la propia persona. Cuando el cambio es percibido como positivo el afectado lo apoya y la nueva situación pronto se consolida, cuando, por el contrario, es percibido como amenaza se generan resistencias y el efecto del cambio a veces se retrasa o no se consolida.

Por ello si queremos producir un cambio hemos de asegurar que los posibles afectados vean las ventajas y las oportunidades para que apoyen la propuesta. La comunicación es el auténtico motor del cambio.

Y, un aspecto adicional, cuando se percibe una amenaza se produce normalmente miedo y el miedo tiende a paralizar la acción, la salida de la situación de peligro. En muchos casos la mejor forma de reaccionar es situarse en "lo peor", considerar como punto de partida el momento posterior al cambio y analizar las oportunidades que existen, siempre las hay, en ese momento.

A veces hay muy gratas sorpresas, lo inicialmente malo se convierte en el comienzo de una etapa mucho mejor de la propia vida.



7. TRABAJAR PARA VIVIR O VIVIR PARA TRABAJAR

Trabajar para vivir o vivir para trabajar no es, salvo excepciones, un dilema real.

Hay personas que se plantean la opción de trabajar lo necesario para vivir en un nivel determinado y dedicar una parte de su tiempo a disfrutar del no hacer.

Dos ejemplos:

Primero, el caso de un matrimonio escocés, hoy ya maduros los dos, con el que me he encontrado varias veces a lo largo de los años en República Dominicana que trabaja nueve meses y disfruta haciendo nada los doce siguientes. El segundo es el de parejas, he encontrado bastantes, "poco ambiciosas", que buscan y obtienen trabajos con horarios más o menos cortos y responsabilidad reducida que les dejan tiempo libre para vivir. En ambos casos se han fijado una meta personal para la propia vida.

Por el contrario, he encontrado muchas otras personas que trabajan mucho y lo hacen por una parte para alcanzar alguna meta profesional, impulsar la propia empresa o simplemente para tener más dinero para gastar. Se podría decir que estas personas puede parecer que viven para trabajar, pero en el fondo, también trabajan para vivir. Es bueno si la meta está definida, es malo si es inercia sin propósito establecido.

El dilema no es vivir para trabajar para vivir o vivir para trabajar sino es tener una meta personal y querer alcanzarla. Cuando existe el objetivo ya no importa si hay que tabajar mucho o trabajar poco, si hay que vivir mucho o poco, el propio camino para llegar a donde sea se convierte en un placer que da sentido a a la vida.

Mi reflexión es hoy, cuando a lo largo de los años todas las personas hemos de cambiar inexorablemente de profesión al menos dos veces en la vida, la necesidad de pensar cada cierto tiempo en la vigencia de nuestra meta personal, evaluar y volver a fijarla nuevamente.

La vida cobra nuevo sentido con la aparición de nuevos objetivos.

8. UN PLAN CON POCAS POSIBILIDADES

Conseguir y mantener una optima comunicación con los ciudadanos concretos es una necesidad importante para los partidos políticos, ya que es el medio imprescindible para conseguir la integración en la sociedad.

La auténtica comunicación es la que tiene una doble dirección, desde el Partido hacia los ciudadanos y desde estos hacia el Partido.

La vía principal de comunicación desde el Partido hacia los ciudadanos son los Medios de Comunicación. Esta vía, aunque vital, no asegura comunicación eficiente con las personas concretas, tanto por fluir en situación de competencia con la emitida por otros partidos, como porque los medios matizan la información desde sus propios posicionamientos.

El medio para recibir información desde la sociedad es, para el Partido, la realización de estudios de opinión. Esta información, si bien es muy valiosa, siempre es insuficiente.

El mejor canal de comunicación entre el Partido y los ciudadanos es el contacto personal que existe entre los miembros del Partido y los ciudadanos concretos. Este contacto multiplica y matiza el valor de lo publicado en la prensa, emitido en televisión y radio, sostenido en Internet.

Por ello me asombra que no se haya puesto en marchas, por ninguno de los partidos políticos españoles un Plan de Comunicación con el Ciudadano, cuyo objetivo fuera fortalecer la capacidad de comunicación del Partido con la sociedad, y la de los ciudadanos concretos con el Partido, todo ello enmarcado en una filosofía de integración permanente de este en el entorno sociedad.

El contenido del Proyecto de Comunicación con el Ciudadano se debería centra en Planificar, organizar, dirigir y controlar una red de comunicación, similar a la red de ventas de cualquier empresa desarrollada, integrada por miembros del Partido, altamente motivados y técnicamente capaces, para hacer llegar a los ciudadanos, mediante el contacto personal, información cualificada, amplia y veraz sobre el Partido, sus realizaciones y proyectos y recoger de estos sus inquietudes, demandas y opiniones, para la gestión política, en el ámbito local, autonómico y, en su caso, nacional.

Pero, indudablemente, este tema es inviable, nuestros partidos aspiran a tener una muy eficaz comunicación descendente y puntual que convenza a los ciudadanos de que los que mandan en la organización tienen razón y hay que votarles. El resto parece que les importa bastante poco

9. EL CENTRO DEL MUNDO NO ESTÁ EN EUROPA

Para muchas cosas es lo mismo estar en España, en Alemania, en Bolivia o en cualquier otra parte, para otras es muy diferente vivir en Madrid, en Palencia, Milán o Cochabamba.

Hoy, como siempre, es mejor para la mayor parte de las personas, estar en un país desarrollado, en una región rica, en una ciudad próspera y cuidada de un estado inmerso en el bienestar que residir en una tierra convulsa donde se ve la pobreza y la educación no esta generalizada.

Pero es también posible que para el crecimiento de las personas, para que las personas puedan ser, sea necesario acercarse alguna vez, por necesidad o placer, al centro del mundo además de disfrutar o padecer los extrarradios.

El Centro del mundo atrae con inmensa fuerza la riqueza, en bienes y personas, de la periferia y reenvía productos, trabajo, lengua y, sobre todo ideas, cultura, ilusión de futuro y emulación para tener y parecerse al centro o ser mejor y diferentes que este.

Cada lugar, cuando es el Centro, produce su mejor literatura, su mejor arte, su mayor fuerza e impulsa su idioma sin aparente esfuerzo. Sófocles, Tácito, Maimónides, Leonardo, Cervantes, Hobbes, Tolstoi, Moliere o Faulkner en Occidente y en Oriente el anónimo autor el Ramayana, Sun Tzu, en el lejano pasado, en el próximo Yukio Mishima, o Mu Zimei en este momento, son la emanación en las letras del esplendor del Centro.

Hoy el Centro del mundo está en un lugar indefinido, entre la costa oeste de América y la este de Asia. En unos años sabremos si se asienta en la zona y China vuelve a ser el Imperio del Centro o, cosa poco probable desde una perspectiva histórica, el centro explota en muchos o pocos pedazos que se dispersan a lo largo y ancho del planeta.

Creo que debemos aceptar, no solo con la razón sino también con el estómago, que el Centro ya no está en las tierras bañadas por el Atlántico, todas próximas, todas nuestras, todas hijas de Grecia, de Israel, de Roma, de Europa. Está en el Pacífico, un océano que baña tierras en las que la cultura es hija de China, Corea, Japón, Birmania o de la tierra de los Thais.

Y esto es posible que tenga algunas consecuencias.



10. EL CENTRO DEL MUNDO NO ESTA EN ESPAÑA

Los españoles y los ingleses han sido los europeos que menos han aprendido los idiomas del resto del mundo, más aún, han justificado este hecho en la superioridad de la propia lengua y en la falsa excusa de especial dificultad propia para entender y pronunciar palabras ajenas.

La realidad es que no lo han necesitado para viajar y trabajar en extensas regiones del globo. Es uno de los réditos de los españoles e ingleses por haber sido el Centro del mundo. Bien es verdad que también fueron españoles e ingleses de otros tiempos quienes más lenguas aprendieron para entenderse con quienes aún no podían conocer sus idiomas y habían de ser convencidos, de grado o por fuerza para ser parte de las propias periferias.

Hoy ya hay ingleses que aprenden chino mandarín. Es normal, la necesidad de no quedar al margen y participar en una economía que será la mayor del mundo obliga a cualquier sacrificio. Los españoles vamos con algo de retraso, pero espero que lo hagamos pronto, yo animare a mis hijos para que los suyos aprendan algo vital para sus propios futuros.

Desde hace más de cuarenta años he viajado y no lo he hecho poco, por Europa y América. Sin embargo, hasta hace poco tiempo, solo después de conocer Asia, he comprendido lo que significa estar lejos del Centro del mundo y las consecuencias que esto tiene inexorablemente para las personas que lo habitamos.

11. EL CENTRO DEL MUNDO NO ES LA PROPIEDAD

España es quizá la nación con mayor porcentaje de viviendas en propiedad. Es acaso el país en que por medio de la propiedad de la vivienda más se fija la población en el lugar inicial de residencia. La movilidad geográfica de los españoles, natural desde siempre, ha caído hasta el punto de ser, en mi opinión, una importante amenaza para el futuro colectivo e individual de las futuras generaciones hasta que la realidad se imponga a todos los esfuerzos para no cambiar.

En España el hecho de casarse implica para las parejas jóvenes un enorme compromiso, por ello pasan meses e incluso años conviviendo para estar seguros en el acierto del matrimonio, se basan en la premisa, creo que falsa, de que es mucho más sencillo romper una relación de hecho que una de derecho.

Sin apenas haberse conocido, las posibles parejas se aprestan a comprar una casa. Es imprescindible y muy natural comprometerse a pagar una hipoteca durante treinta o cuarenta años. Asumir que han de trabajar los dos para pagar cada mes es más aceptable, previo y mejor que hacer promesa de fidelidad mutua aunque fuera por un tiempo menor a la duración de la hipoteca. El juramento de amarse, ser fieles y cuidarse mutuamente, en lo bueno y en lo malo, en la salud y en la enfermedad, allá donde la vida, por ser y para ser personas, les pueda llevar es demasiado compromiso.

Tener una casa y pagar con esfuerzo una hipoteca, es un refuerzo importante a las razones afectivas que pueden anclar a las personas en un lugar de residencia. A veces hasta personas que desearían cambiar no lo pueden hacer porque no pueden recuperar siquiera la parte de la inversión necesaria para iniciar otra etapa en otro lugar.

Y esto, estando muy lejos del Centro del mundo es un enorme peligro, aunque podamos viajar de vacaciones a miles de kilómetros o chatear en Internet con amigos desconocidos.



12. EL CENTRO DEL MUNDO OBLIGA A VIAJAR

Sí, el Centro del mundo está muy lejos de cualquier lugar en el que vivamos, la mayor parte de los ciudadanos de la tierra.

Por ello, creo que aunque nos agrade vivir en un lugar determinado y que para cada uno de nosotros el centro sea tan diferente como el barrio de Argüelles en Madrid, Obrajes en La Paz o La Eliana en Valencia, es imprescindible viajar.

Entiendo por viajar relacionarse con las personas que viven en cada lugar, conocer lo que sucede en sus entornos, leer sus periódicos o entender lo que se está diciendo cuando habla en la televisión un Ministro de Finanzas de nombre desconocido.

Y es también necesario vivir durante buenas temporadas en ciudades lejanas, crear nuevas relaciones, incrementar las listas de nuestros correos electrónicos, comprender los temas comunes y darnos cuenta de los matices que nos hacen diferentes. Por ello nunca, hasta ser mayores, debemos fijarnos para siempre en un lugar, Estar lejos de lo propio ayuda a desarrollar capacidades adicionales para entender lo que visto desde fuera puede parecer obvio y no lo es tanto.

Cuando viajamos, cuando vivimos fuera, nos enriquecemos porque cada vez entendemos mejor lo ajeno y al entenderlo nos aproximamos a los centros del mundo real, que son, al final, aunque estén en la periferia, todos los lugares donde hay personas que pugnan no solo por supervivir sino también por progresar.

13. MANIPULACIONES. UNA MUJER

Hay veces que tardas años en darte cuenta que te han manipulado. Lo piensas, te llamas idiota, te irritas, lo vuelves a pensar y llegas a la conclusión de que posiblemente hubieras hecho lo mismo sin que te hubieran manipulado.

Hace bastante tiempo ocupaba un puesto con responsabilidad sobre muchas personas en una organización caracterizada por el énfasis en la calidad de sus productos y el rigor ético de sus comportamientos.

Una mañana, mas temprano de lo habitual, recibí en el despacho a la empleada que había solicitado la entrevista para tratar un tema personal e importante para ella.

La mujer me dijo que estaba en la lista de futuros despedidos de una planta de producción y que eso era un gran problema para ella y para su familia. Además, dos empleados de mayor nivel le habían dicho que la solución era sencilla, ellos la podían sacar de la lista, para lo cual solo tenía que ser una buena amiga y disfrutar juntos de íntima compañía.

La mujer me aseguro que después de pensarlo había llegado a la conclusión de que si con ser buena amiga tenía seguridad en su trabajo lo mejor era ofrece su intimidad a quien realmente tenía el poder y no correr riesgos con personas que quizá solo querían cobrar por anticipado y no cumplir el trato.

Como era normal en la cultura de la organización, la mujer salvó su posición y los presuntos amigos entraron en la lista sin que hiciera falta que el tema de la amistad estuviera presente en momento alguno.

Hoy tengo claro que alguien impulsó a la mujer para pedir la entrevista, para denunciar el acoso y , para dar veracidad al hecho, ofrecerme su intimidad.

Pienso que a mi me manipularon, y creo que con la mujer también lo hicieron, acaso para quitarse de en medio a los dos amigos cariñosos.

Les salió bien, pero creo que hubieran conseguido un objetivo mayor si les hubiera salido un poco mejor, si yo en lugar de responder dentro de la cultura de la empresa hubiera sido un idiota, en ese caso alguien hubiera tenido poder sobre el idiota.

Mirando atrás tengo claro que aunque la mujer no me hubiera contado la historia el resultado hubiera sido el mismo, yo me hubiera ahorrado entonces el berrinche y ahora no sabría que me manipularon.

Me molesta un poco, pero lo cierto es que no me importa demasiado haber sido manipulado en este caso.

14. MANIPULACIONES: DOLOR DE MUELAS

Tenemos un problema. De este tema el que sabe eres tú, además eres el responsable.

Cuando alguien, persona inteligente y capaz, llega a tu despacho y te saluda con este comienzo lo primero que se te ocurre es que de lo que te va a contar tu sabes lo mismo de poco que él, pero que tienes que dar una solución eficiente.

Mientras hablamos, a trescientos kilómetros de distancia, el Gerente de una Unidad de Negocio está reunido con su Director Comercial y con su vendedor estrella.

Están tratando de que este les diga donde está el dinero, bastante, que ha hurtado a lo largo de los meses mediante el cobro a clientes con duplicados de facturas. No pueden creer que haya volado en juego o mujeres ni tampoco que lo haya dedicado a otros menesteres más sensatos.

El comercial dice recordar nada, pero dice también que no hay motivo de preocupación para nadie. Tiene el seguro de vida de la empresa que cubre con holgura la cuantía mal cobrada y cuenta además con otro seguro privado adicional cuyo importe, unido a la pensión por accidente de trabajo que va a cobrar su viuda permitirá a su familia un buen pasar, acorde con su buena posición familiar en la sociedad de la capital de la provincia.

Además no va a cometer ningún disparate ya que tiene un tumor maligno en la cabeza que le han detectado hace unos meses cuando por indicación de su médico, un prestigioso doctor, se hizo para comprobar las causas de un dolor muy intenso en la nuca. No hay solución y en pocas semanas estará muerto de todos modos y lo único que va a hacer es anticipar la inexorable solución final a la noche de este día.

Lo único que siente es que su jefe haya descubierto el tema y causado un gran disgusto a las dos personas que le acompañan en estos momentos. Su familia no sabe nada y tampoco tiene necesidad de saberlo.

Todo esto nos lo relata por teléfono el Gerente, nos dice además que no se cree nada, que tiene delante a un sinvergüenza, pero que José Luis me diga que es lo que hay que hacer.

Evidentemente, para entonces yo tenía alguna experiencia y sabía muy bien que yo tampoco podía creerme nada, la mente humana es capaz de lo inimaginable y cualquier cosa podría ser verdad. Hasta podría ser verdad que si este hombre salía del despacho en el que se encontraba hiciera cualquier cosas, hasta usar un billete de avión para esconderse en Brasil con una preciosa mulata.

La primera decisión fue absolutamente insensata. No hagáis nada, darle conversación, apretarle cuanto podáis pero no le dejéis solo ni un momento, salgo ahora, en cuatro horas estaré allí y lo arreglará.

Me dolían las muelas una barbaridad, cada uno de los primeros doscientos kilómetros del camino estuve sometido a la doble tortura de pensar qué debía hacer y aguantar el dolor de muelas.

De repente se hizo la luz en mi mente, la solución obvia, No quiero las monedas de Judas. No habrá dinero del seguro de vida, no habrá dinero del seguro de accidentes, no habrá dinero de ninguna parte y, por supuesto no habrá pensión de viudedad un céntimo mayor de la normal. Si elimino el objetivo no puede haber acción alguna para conseguir lo que no existe.

Eran las once de la noche, lo recuerdo muy bien. Desapareció el dolor de muelas, ya podía descansar tranquilo. Otros cien kilómetros y a dormir en un buen hotel, una vez dicho al Gerente que el tema estaba resuelto, pero que para asegurar el resultado debía continuar todo igual hasta por la mañana. Así fue.

15. MANIPULACIONES: UN IDIOTA

Una temporada tuve próxima a una de esas personas amargas que detestan profundamente a su padre, quizá porque le culpaba del suicidio de su madre ocurrido muchos años antes. El padre también murió de su propia mano y esta persona celebró, con insatisfacción a pesar de la cuantía, la recogida de su herencia.

Durante años me hizo sentir una profunda angustia. Tenía la extraña habilidad de hacerte sentir el probable responsable de su propio suicidio y de sus consecuencias.. Pedía y pedía, siempre con la amenaza latente del próximo final caso de no satisfacer sus constantes demandas.

Mucho más tarde de lo debido hube de cortar el apoyo. La carga era excesiva y ya no podía soportarla por más tiempo. No se suicido.

La he perdido de vista, pero estoy seguro de que esta persona antes de llegar a su final, ya no me preocupa excesivamente cual pueda ser, habrá manipulado a otros incautos que se habrán dejado convencer de que pueden ser responsables de que el hijo de suicidas también acabe muerto por su propia voluntad.

A veces somos absolutamente idiotas y esta es una ocasión clara en la que yo lo he sido.

16. MANIPULACIONES: EL OTRO LADO DE LA CINTA

Nos creemos lo que queremos creer y basta que alguien escuche lo que quiere escuchar para que lo admita sin ponerlo en duda.

Un empleado estaba muy necesitado de promoción y reconocimiento. Sus aptitudes para ocupar una posición diferente muy limitadas. Mi interés por mantener la satisfacción y la actitud positiva de esta persona también era alta.

Al final decidí hacer realidad sus deseos y con toda formalidad hice público el nombramiento en los tablones de anuncios de la empresa y en la revista interna mediante un texto en el que se podía leer aproximadamente el siguiente texto:

“Con efecto del próximo día 1 de Abril, D. Juan de Juan ocupará el puesto de Responsable del Otro Lado de la Cinta.

El Sr. De Juan se ha hecho acreedor a esta posición por su buen trabajo durante nueve años en nuestra empresa y el nombramiento hace justicia a su capacidad profesional y buen hacer.

Deseamos a este gran empleado grandes éxitos en el desempeño de su nueva responsabilidad.”

El anuncio causó un gran estupor. Nadie podía entender que se promocionara a Juan y nadie sabía que existiera el nuevo puesto.

El primero en acudir a preguntarme, muy agradecido, fue el interesado. Le felicité, le animé, prometí apoyo y no le dije cuales eran las funciones del nuevo puesto.

El segundo, el tercero y todos los siguientes que me preguntaron recibieron la misma respuesta. Las cualidades de Juan, el merecimiento de nuestro apoyo y la seguridad del éxito, por supuesto nunca expliqué las nuevas funciones de Juan.

Cuando habían pasado ya muchos días, estaba en vigor el nombramiento y Juan había recibido su nuevo salario, no muy distinto del anterior, Juan acudió a preguntarme en qué consistía su función de responsable. Le dije, con grandes palabras, que estaba habiendo una gran labor, que me sentía orgulloso de su eficiencia, que había sido un enorme acierto su nombramiento, que siguiera haciendo lo que hacía.

Juan seguía haciendo lo que hacía, su jefe de cuando en cuando me preguntaba y yo siempre le ratificaba, que siga haciendo lo que hace, que lo está haciendo muy bien y también le felicitaba por su buen hacer como jefe de Juan.

Juan se consolidó como Responsable del Otro Lado de la Cinta. Se fue olvidando el tema, nadie supo nunca en qué consistía el puesto y las razones del éxito de Juan, pero tenía su nombramiento, se había publicado, estaba escrito en su tarjeta de visita y el estaba mucho mas satisfecho.

Yo, además del tema de Juan, había lanzado una muy seria y exitosa advertencia a quien pudiera poner en duda que se podía hacer lo que José Luis decía que había que hacer.

17. HAY QUE SALIR DE LA JAULA

Hay pájaros que renuncian a volar y prefieren quedarse en la jaula, con alimentos y seguridad.

Aparentes paraísos o malos lugares, vistos desde fuera son terribles a veces terribles prisiones para quien vive en su interior. Son jaulas, a veces de oro, que aunque tienen las puertas abiertas o al menos entornadas, emanan narcóticos tan fuertes que doblegan la voluntad y hacen inviable, la posibilidad de escapar.

Jaulas en las que han vivido, viven todavía, y sufren la vida millones de mujeres que obedecen, muertas de miedo, a un marido carcelero. Jaulas de religiones que exigen la vida. Jaulas ideológicas que piden la muerte, Jaulas afectivas que generan sufrimiento y obstruyen el libre raciocinio. Jaulas todas que privan a las personas de la libertad de acertar o equivocarse.

Estar dentro de la jaula es saber donde estas, es estar en la seguridad. Salir de la jaula es riesgo, es una puerta abierta a lo incierto.

Fuera de donde estas, iglesia, familia, partido, nación, ciudad, empresa, grupo, organización, escuela, hay salvación. Y a veces es muy deseable para el ser humano salir de donde está.

He conocido personas en jaulas mugrientas, atadas a la miseria y las he conocido en automóviles enormes, en casas lujosas y en empresas modélicas. Y, lo que es más terrible, a lo largo de los años he diseñado alguna jaula y vivido a temporadas en alguna otra.

Por ello, y como medio para salir, o al menos limar las ataduras, creo que tiene sentido una reflexión que me ha ayudado en no pocas ocasiones:

Cuando estamos inmersos en situaciones difíciles, o estamos en una jaula, lo normal es que todos, hasta los mejores, percibamos amenazas y sintamos miedo, mucho miedo, a perder lo que tenemos. La vía para superar el miedo y salir es ponerse en el peor de los casos y analizar las oportunidades que se nos abren a partir de ese momento. Hay veces que "lo peor" es la llave de una nueva y acaso mejor, etapa de la vida.

18. DEL AMOR AL ODIO Y POBRE DEL QUE SE INTERPONGA

Era una buena secretaria, educada, eficiente y muy alegre. Desde su incorporación, con un contrato inicial de seis meses, yo preguntaba a los miembros de mi unidad sobre los progresos que percibían en esta persona. Todo muy bien y yo encantado.

Cuando faltaban dos o tres semanas para el final del contrato y su incorporación definitiva una mañana ella entró en el despacho, se sentó muy rígida y con el rostro muy tenso y antes de que le pudiera preguntar nada ella me dijo: “ya se que me va a despedir, la culpa la tiene Ruanito, me odia porque no me quiero acostar con él”

Yo me quedé pasmado y muy asustado. El hecho me parecía imposible y más imposible todavía el que se pudieran expresar ciertas cosas con un lenguaje tan directo y brutal. Solo atiné a decirle que se calmara, que no dijera cosas raras y que hablaríamos al día siguiente. Tenía que pensar.

No habían pasado tres minutos cuando Ruanito entro en el despacho, serró la puerta y me dijo: “ a Zutanita hay que rescindirle el contrato, es una inútil y encela a los hombres que se le acercan”

Le dije que durante muchos meses me había hablado maravillas de Zutanita y que yo estaba muy contento con ella, que no entendía nada, que había muchos días hasta el final del contrato, que me dejase tranquilo. Volveríamos a hablar del tema mas adelante.

Estaba asustado, no entendía nada. Los temas de mujeres y hombre no han sido nunca de mi interés y menos mi especialidad. . Él era un tímido solterón, nada culto y poco sofisticado, aficionado a salir con los amigos y a cumplir largas jornadas de trabajo bastante administrativo. Ella universitaria, bien educada, divorciada y con buenos recursos, aficionada a viajar, el arte, los caballos y una activa vida social. No encajaba absolutamente nada.

Nada más llegar a casa se lo conté a mi mujer. Ella lo tenía muy claro, Zutanita es mucha mujer para este hombre, seguro que le ha tratado bien, ha jugado un poco, le ha sonreído, le ha dado esperanzas, él se lo ha creído y tiene el despecho de una mona. No tiene solución, ¿Qué vas a hacer?

Todo salió mal, El perdió un buen puesto, ella uno que no le importaba demasiado y yo me quedé con la sensación de que, aunque idiota por no haberme enterado de lo que todo el mundo sabía, no había sido demasiado injusto en la forma de resolver un tema que, bien me dijo mi mujer, no tenía solución

19. HAY ENSEÑANZAS QUE REQUIEREN MUCHO, MUCHO TIEMPO

Un anochecer de 1969, en la Universidad Católica de La Paz, en Bolivia, alguien me avisó de que teníamos que dejar marcharnos porque el Regimiento de los Rangers se había sublevado y como el cuartel estaba a la entrada de la ciudad, si no salíamos pronto era casi seguro que no podríamos regresar a casa esa noche.

El despacho del Dr. Siles Salinas era contiguo al mío y nada mas recibí la noticia acudí a avisarle. Jorge, le dije, tenemos que marcharnos, parece que hay un Golpe de Estado y pueden cerrar la carretera.

Jorge me dijo, siéntate un momento y lee el artículo que estoy escribiendo para la Tercera de ABC. Ante la insistencia del profesor leí un precioso trabajo que aún hoy recuerdo bien, sobre la influencia de Ortega y Gasset en Maritain.

Al menos dediqué cinco o seis minutos a la lectura y, no menos de un buen rato a escuchar aspectos del tema que por su profundidad no podían incluirse en el entonces prestigioso periódico de Madrid.

Al cabo de un rato volví a ser consciente de la situación, el posible Golpe de Estado y el no retorno a la ciudad.

Mi último recuerdo de aquella tarde y de muchos días posteriores es el paseo tranquilo y sosegado, escuchando a Jorge, desde su despacho hasta la entrada del la Universidad.

He recordado y repetido muchas veces esta anécdota y lo he hecho hasta ahora como una muestra de la personalidad extraordinaria del Dr. Siles Salinas, capaz de estar en el pensamiento europeo sin apreciar en absoluto la idiota barbarie de un intento de golpe militar.

Ahora, siete lustros más tarde, he comprendido la lección que Jorge me estaba dando aquella tarde. La política enloquecida de la época en Bolivia no merecía atención alguna, era un corto bajar de las aguas por un torrente pedregoso. Lo que sí valía la pena era la reflexión sobre lo que hace a los hombres comportarse de forma que todos puedan bañarse en las aguas del río tranquilo de la paz.

En este tiempo que vivimos en España, con una política propia de otros tiempos y escaso sentido común, deberíamos, como Jorge Siles Salinas en aquella tarde noche de 1969, dedicar nuestro tiempo a reflexionar sobre lo que hace a los hombres ser hombres que quieren la paz.

20. ACTITUDES POSITIVAS: TORRELAVEGA 1978

Quienes por unas u otras razones nos ocupamos de temas relacionados con la gestión de personas repetimos hasta el aburrimiento la necesidad de tener actitudes vinculativas de igualdad en todos los procesos de comunicación y, para demostrarlo hacemos sencillos ejercicios ayudan a descubrir este hecho.

Lo que no hacemos, por la doble razón de que sería un canto innecesario a la propia vanidad y por lo poco útil que resulta, es contar experiencias personales que avalan el aserto. Hoy, en el largo proceso de reflexión iniciado con este blog voy a relatar tres experiencias.

Antes de contar las experiencias, decir que, expresado de forma sencilla, la actitud vinculativa implica que para nosotros la otra persona es importante y que además por ser nuestro igual, le tratamos con el respeto que merece un adulto. Y, en consecuencia con la actitud que demostramos el comportamiento de la otra persona es, normalmente muy positivo hacia nosotros.

En el lenguaje de la sabiduría popular los efectos del uso adecuado de la actitud vinculativa de igualdad se pueden reflejar en el dicho “mas moscas se cazan con miel que con hiel”.

Primer ejemplo:

Primavera de 1978. Torrelavega, Cantabria. Las 9 de la mañana.
El personal de la fábrica de Firestone, una plantilla con más de tres mil trabajadores, había iniciado una huelga a las 6 de la mañana. En la entrada una gran cantidad de personas, no se cuantas, pero sí que eran muchas, ocupaba la carretera general y los accesos a la planta. No se permitía acceder a las instalaciones. El ambiente, como es normal, en el primer día de huelga, cargado de tensión.

Mi jefe, Luciano Cuchí, Director Social de la empresa, extraordinario profesional y mi auténtico maestro, me había advertido que yo, como representante suyo y responsable de la gestión de la huelga en las factorías de Torrelavega, debía estar dentro de las instalaciones antes del comienzo de la huelga, si no lo hacía era seguro que me quedaría fuera, y no podría desempeñar mi papel de forma correcta.

Lamentablemente esa mañana me quedé dormido, más aún, cuando mi mujer luego de sonar el despertador, me advirtió de la hora, me negué a levantarme. Seguí durmiendo hasta más allá de las ocho de la mañana. Bien vestido, recién peinado, la barba impecable y el consiguiente susto, a las 9 de la mañana estaba detenido, dentro del coche, con las ventanillas bien abiertas, rodeado de personas, en medio de un buen griterío, y con el miedo de responder ante mi jefe por no estar a la hora en mi sitio y haber creado un conflicto adicional si resultaba agredido por mi imprudencia, me vi obligado a pensar.

Por favor, ¿Donde está el Javi?, pregunté con mis mejores modales y actitud amistosa a quienes ya empujaban el coche hacia el pequeño barranco. El Javi, era el presidente del Comité de Huelga y evidentemente no estaba en el centro del gran piquete, controlaba la situación desde un bar a varios cientos de metros.

Por favor, ¿Está por ahí Alfredo?. Tardó un tiempo en llegar, era el segundo en el mando y aunque no estaba lejos también estaba haciendo, y bien, su trabajo de controlar el evento. Durante ese rato, con palabras amables y actitud positiva, a pesar del mucho ruido, el coche seguía dentro del asfalto y mi peinado impecable cuando apareció, mandando, Alfredo.

Pero “¿Qué hace usted aquí?, tendría que estar dentro, no voy a poderle dejar entrar, estamos en huelga y los trabajadores ahora son incontrolables”

“Alfredo, lo siento mucho, ya se que el piquete tiene que cumplir su obligación e impedir que se entre en la fábrica, de verdad, lo siento muchísimo, pero he tenido que hacer gestiones antes de venir y ahora tengo que entrar.”

“Pero hombre, como me puede hacer esto, no puede pasar, no oye los gritos, es una barbaridad”

“Alfredo, es por el bien de todos, antes o después habrá que terminar la huelga y si me tiráis al barranco yo tendrá que ir , por lo menos, al hospital y ¿Con quién vais a negociar?”

Alfredo se marcó, subido en el capó del coche, un buen discurso, maldijo mucho, me insulto un poco y me dejaron pasar.

Creo que uno de los mayores aciertos en mi vida profesional fue llegar tarde aquella mañana. Tuve la suerte de ganarme el respeto y un poco de aprecio personal de no pocos trabajadores de los que estaban allí y de otros que escucharon el relato, indudablemente adornado, de los hechos.