domingo, 4 de febrero de 2024

1011. EN MI 80 CUMPLEAÑOS

 

Hoy, 4 de febrero de 2024, cumplo, he cumplido, 80 años.

Y, cuando pienso en ello, lo primero que aparece en mi memoria es una imagen, la única que recuerdo, de Balarrasa, una película que vi siendo un niño y que me ha perseguido, con mayor o menor intensidad, durante lustros: es la de un hombre, desesperado, pidiendo perdón al cielo por tener, al final de su vida, las manos vacías.

Y, ahora, con 80 años, al mirarme las manos, veo que, sin darme cuenta, se han ido llenando, ¡cuánta fortuna!, de esos inmensos bienes que son los aciertos y los errores, los éxitos y los fracasos, las alegrías y las tristezas, tener salud y vivir la enfermedad, gozar el amor y sufrir el desamor.

Pero, sé bien que nada de ello es mérito mío; en la vida, mucho, casi todo, incluido el haber nacido, es fruto del Azar, la Providencia o el Destino, y en las muy contadas ocasiones en que me pareció haber elegido las consecuencias, buenas o malas, a la larga nunca fueron las que había previsto. 

Así, y sigo pensando; mis años de vida han sido un soplo, largo y muy corto, en el que todo ha cabido; y, por ello, cuando ya soy prescindible, porque es obligado, a Dios  estoy muy, muy agradecido.



1 comentario:

Anónimo dijo...

Profundo,realista y siempre dando gracias a Dios.0